Medicina
Microplásticos y nanoplásticos se relacionan con el riesgo cardiovascular
Los microplásticos y nanoplásticos están presentes en todo el ecosistema, y su ubicuidad los ha convertido en una amenaza para el medio ambiente y para la salud. Al estar presentes en la cadena alimentaria, ingerimos microplásticos y nanoplásticos constantemente con la comida o el agua, pero también mediante inhalación o el contacto con la piel. Análisis previos han confirmado la presencia de microplásticos y nanoplásticos en diversos tejidos humanos, incluida la placenta, los pulmones, la sangre o la leche materna. Adicionalmente, estudios preclínicos han documentado que estos residuos plásticos producen daño en las células vasculares y endoteliales en distintos modelos experimentales.
Un estudio reciente (Marfella et al., 2024) ha investigado la relación entre la presencia de microplásticos y nanoplásticos en las placas de ateroma y el riesgo de episodios cardiovasculares y mortalidad. Se reclutaron 304 pacientes entre 18 y 75 años con endarterectomía carotidea programada cuyo objetivo es eliminar la placa de ateroma y la estenosis severa que obstruye las arterias. Tras la intervención, se analizaron las placas de ateroma para determinar la presencia de nanoplásticos y microplásticos. Las pruebas de laboratorio revelaron la presencia de microplásticos y nanoplásticos en 150 pacientes, en particular polietileno y cloruro de polivinilo.
Tras la operación, 257 pacientes completaron un seguimiento con una media de más de 33 meses, registrándose la ocurrencia de eventos cardiovasculares como infarto de miocardio, accidente cerebrovascular o muerte por cualquier causa, encontrándose un número mucho mayor de estos eventos combinados (HR 4.53). También se observó una relación entre la presencia de estos materiales en las placas y la presencia de marcadores inflamatorios, así como de infiltración de linfocitos y macrófagos, lo que sugiere que los plásticos activan procesos inflamatorios en el tejido cardiovascular.
En conclusión, este estudio sugiere que los microplásticos y nanoplásticos pueden ser un factor directo de riesgo cardiovascular y de mortalidad. Futuros estudios deben confirmar este hallazgo.
Un estudio reciente (Marfella et al., 2024) ha investigado la relación entre la presencia de microplásticos y nanoplásticos en las placas de ateroma y el riesgo de episodios cardiovasculares y mortalidad. Se reclutaron 304 pacientes entre 18 y 75 años con endarterectomía carotidea programada cuyo objetivo es eliminar la placa de ateroma y la estenosis severa que obstruye las arterias. Tras la intervención, se analizaron las placas de ateroma para determinar la presencia de nanoplásticos y microplásticos. Las pruebas de laboratorio revelaron la presencia de microplásticos y nanoplásticos en 150 pacientes, en particular polietileno y cloruro de polivinilo.
Tras la operación, 257 pacientes completaron un seguimiento con una media de más de 33 meses, registrándose la ocurrencia de eventos cardiovasculares como infarto de miocardio, accidente cerebrovascular o muerte por cualquier causa, encontrándose un número mucho mayor de estos eventos combinados (HR 4.53). También se observó una relación entre la presencia de estos materiales en las placas y la presencia de marcadores inflamatorios, así como de infiltración de linfocitos y macrófagos, lo que sugiere que los plásticos activan procesos inflamatorios en el tejido cardiovascular.
En conclusión, este estudio sugiere que los microplásticos y nanoplásticos pueden ser un factor directo de riesgo cardiovascular y de mortalidad. Futuros estudios deben confirmar este hallazgo.
Raffaele Marfella, MD, Ph.D.,Francesco Prattichizzo, Ph.D.,Celestino Sardú, MD, et al. Microplastics and Nanoplastics in Atheromas and Cardiovascular Events. March 7, 2024N Engl J Med 2024; 390:900-910 DOI: 10.1056/NEJMoa230982
* Las noticias publicadas sobre estudios no suponen un posicionamiento oficial de ICNS, ni una recomendación clínica.
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