Neurociencia y Psicología
La belleza femenina no predice mayor fertilidad
En este artículo, se examina la "hipótesis de la fertilidad", la cual postula que ciertas formas corporales son consideradas atractivas porque predicen de manera confiable una mayor fertilidad en las mujeres.
Tradicionalmente, esta hipótesis ha sido aceptada por diversos investigadores en el campo de la biología evolutiva y la psicología. En países desarrollados, las mujeres que son consideradas más atractivas suelen presentar un índice de masa corporal más bajo, con una cantidad reducida de grasa corporal, particularmente un índice de masa corporal de alrededor de 17, según diversas encuestas.
Sin embargo, este nivel bajo de grasa corporal está asociado con niveles bajos de leptina, una hormona producida por las células adiposas, que a su vez se relaciona con la amenorrea y la infertilidad. Esto plantea una contradicción importante en la "hipótesis de la fertilidad".
En contraste, en las sociedades en desarrollo, una revisión de 144 estudios ha encontrado que los hombres prefieren mujeres con un índice de masa corporal más alto. A diferencia del patrón observado en mujeres de países desarrollados, los índices de masa corporal de las mujeres en estas sociedades tienden a permanecer bajos y a menudo disminuyen con la edad y la fertilidad. Esto sugiere que los recursos de grasa, relevantes para la reproducción, se agotan con cada ciclo reproductivo. Por lo tanto, las mujeres con un índice de masa corporal más alto de lo típico en sus poblaciones tienden a tener un mayor número de hijos.
Todos los estudios que muestran un efecto estadísticamente significativo indican que las formas corporales consideradas atractivas en los países desarrollados están asociadas con una baja fertilidad. Esto se aplica a todos los elementos clave del éxito reproductivo femenino: la duración reproductiva, la fecundidad, los nacimientos vivos y la supervivencia infantil.
Entonces, si las mujeres más atractivas no presentan mejor salud y fertilidad, ¿por qué persiste esta preferencia masculina? Una posible explicación surge de la observación de que el índice de masa corporal de las mujeres y la relación cintura/cadera son predictores confiables de la edad. Las mujeres más jóvenes, que presentan un mayor valor reproductivo, tienden a tener un índice de masa corporal más bajo y una relación cintura/cadera menor, características que podrían ser percibidas como signos de juventud y, por ende, de mayor potencial reproductivo.
En conclusión, la "hipótesis de la fertilidad" plantea una compleja interrelación entre las preferencias estéticas y la biología reproductiva, sugiriendo que las señales de juventud podrían tener un papel más destacado en la percepción de la atracción que los indicadores directos de fertilidad.
Tradicionalmente, esta hipótesis ha sido aceptada por diversos investigadores en el campo de la biología evolutiva y la psicología. En países desarrollados, las mujeres que son consideradas más atractivas suelen presentar un índice de masa corporal más bajo, con una cantidad reducida de grasa corporal, particularmente un índice de masa corporal de alrededor de 17, según diversas encuestas.
Sin embargo, este nivel bajo de grasa corporal está asociado con niveles bajos de leptina, una hormona producida por las células adiposas, que a su vez se relaciona con la amenorrea y la infertilidad. Esto plantea una contradicción importante en la "hipótesis de la fertilidad".
En contraste, en las sociedades en desarrollo, una revisión de 144 estudios ha encontrado que los hombres prefieren mujeres con un índice de masa corporal más alto. A diferencia del patrón observado en mujeres de países desarrollados, los índices de masa corporal de las mujeres en estas sociedades tienden a permanecer bajos y a menudo disminuyen con la edad y la fertilidad. Esto sugiere que los recursos de grasa, relevantes para la reproducción, se agotan con cada ciclo reproductivo. Por lo tanto, las mujeres con un índice de masa corporal más alto de lo típico en sus poblaciones tienden a tener un mayor número de hijos.
Todos los estudios que muestran un efecto estadísticamente significativo indican que las formas corporales consideradas atractivas en los países desarrollados están asociadas con una baja fertilidad. Esto se aplica a todos los elementos clave del éxito reproductivo femenino: la duración reproductiva, la fecundidad, los nacimientos vivos y la supervivencia infantil.
Entonces, si las mujeres más atractivas no presentan mejor salud y fertilidad, ¿por qué persiste esta preferencia masculina? Una posible explicación surge de la observación de que el índice de masa corporal de las mujeres y la relación cintura/cadera son predictores confiables de la edad. Las mujeres más jóvenes, que presentan un mayor valor reproductivo, tienden a tener un índice de masa corporal más bajo y una relación cintura/cadera menor, características que podrían ser percibidas como signos de juventud y, por ende, de mayor potencial reproductivo.
En conclusión, la "hipótesis de la fertilidad" plantea una compleja interrelación entre las preferencias estéticas y la biología reproductiva, sugiriendo que las señales de juventud podrían tener un papel más destacado en la percepción de la atracción que los indicadores directos de fertilidad.
Lassek, W. D., & Gaulin, S. J. C. (2018). Do the Low WHRs and BMIs Judged Most Attractive Indicate Higher Fertility? Evolutionary Psychology, 16(4). https://doi.org/10.1177/1474704918800063
* Las noticias publicadas sobre estudios no suponen un posicionamiento oficial de ICNS, ni una recomendación clínica.