Medicina
Un suplemento de zinc puede acortar la duración del resfriado
El zinc es un oligoelemento esencial para el organismo. Este mineral carece de mecanismos especializados de almacenamiento, lo que hace imprescindible su ingesta regular en pequeñas cantidades para mantener la salud y el funcionamiento fisiológico óptimo. El zinc participa en numerosos procesos biológicos, incluyendo la función inmunitaria, y algunos estudios han sugerido que su deficiencia puede comprometer la función inmunitaria, incrementando el riesgo de infecciones.
Una revisión sistemática reciente de la librería Cochrane (Nault et al., 2024) evaluó la eficacia y seguridad del zinc en la prevención y tratamiento del resfriado común. El análisis incluyó 34 ensayos controlados aleatorios realizados con niños y adultos en varios países. 19 de los ensayos evaluaron el zinc como tratamiento en individuos tras un diagnóstico clínico de resfriado común o infecciones respiratorias superiores, mientras que 15 ensayos analizaron su capacidad preventiva. Los participantes fueron asignados aleatoriamente a recibir zinc en diversas formas y dosis, o un placebo. Se evaluaron la proporción de participantes que desarrollaron resfriados, la duración del mismo, la severidad y duración de los síntomas, la aparición de eventos adversos y los días perdidos de trabajo o escuela.
Los resultados indicaron que la suplementación con zinc reduce la duración del resfriado en aproximadamente dos días. El zinc también podría reducir ligeramente la proporción de días de absentismo escolar y laboral, aunque la evidencia es de muy baja certeza. No se observó una diferencia significativa en la severidad global de los síntomas entre los grupos de zinc y placebo. A nivel preventivo, el zinc no redujo el riesgo de desarrollar un resfriado en comparación con el placebo.En general, no se reportaron eventos adversos graves, sin embargo, se observó un aumento de eventos adversos leves en el grupo de tratamiento, particularmente en aquellos que tomaron dosis más altas de zinc en forma de pastillas.
En conclusión, esta revisión sistemática sugiere que la administración de zinc puede ser beneficiosa para reducir la duración de los síntomas en individuos ya afectados por la enfermedad. La heterogeneidad observada en los diseños de los estudios, las características de las poblaciones analizadas, así como en las formas y dosis administradas de zinc, impide extraer conclusiones más delimitadas. Cabe mencionar algunas limitaciones metodológicas en términos de variabilidad de las muestras, duración de los estudios y periodos de seguimiento. Es necesario realizar algunos estudios adicionales con diseños metodológicos más robustos, y que consideren la biodisponibilidad de las distintas formas de zinc para evaluar su eficacia y seguridad.
Una revisión sistemática reciente de la librería Cochrane (Nault et al., 2024) evaluó la eficacia y seguridad del zinc en la prevención y tratamiento del resfriado común. El análisis incluyó 34 ensayos controlados aleatorios realizados con niños y adultos en varios países. 19 de los ensayos evaluaron el zinc como tratamiento en individuos tras un diagnóstico clínico de resfriado común o infecciones respiratorias superiores, mientras que 15 ensayos analizaron su capacidad preventiva. Los participantes fueron asignados aleatoriamente a recibir zinc en diversas formas y dosis, o un placebo. Se evaluaron la proporción de participantes que desarrollaron resfriados, la duración del mismo, la severidad y duración de los síntomas, la aparición de eventos adversos y los días perdidos de trabajo o escuela.
Los resultados indicaron que la suplementación con zinc reduce la duración del resfriado en aproximadamente dos días. El zinc también podría reducir ligeramente la proporción de días de absentismo escolar y laboral, aunque la evidencia es de muy baja certeza. No se observó una diferencia significativa en la severidad global de los síntomas entre los grupos de zinc y placebo. A nivel preventivo, el zinc no redujo el riesgo de desarrollar un resfriado en comparación con el placebo.En general, no se reportaron eventos adversos graves, sin embargo, se observó un aumento de eventos adversos leves en el grupo de tratamiento, particularmente en aquellos que tomaron dosis más altas de zinc en forma de pastillas.
En conclusión, esta revisión sistemática sugiere que la administración de zinc puede ser beneficiosa para reducir la duración de los síntomas en individuos ya afectados por la enfermedad. La heterogeneidad observada en los diseños de los estudios, las características de las poblaciones analizadas, así como en las formas y dosis administradas de zinc, impide extraer conclusiones más delimitadas. Cabe mencionar algunas limitaciones metodológicas en términos de variabilidad de las muestras, duración de los estudios y periodos de seguimiento. Es necesario realizar algunos estudios adicionales con diseños metodológicos más robustos, y que consideren la biodisponibilidad de las distintas formas de zinc para evaluar su eficacia y seguridad.
Nault D et al. Zinc for prevention and treatment of the common cold. Cochrane Database of Systematic Reviews 2024, Issue 5. Art. No.: CD014914. DOI: 10.1002/14651858.CD014914.pub2. Accessed 23 July 2024.
* Las noticias publicadas sobre estudios no suponen un posicionamiento oficial de ICNS, ni una recomendación clínica.
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