Medicina
¿Cuál es la diferencia entre una revisión narrativa y una revisión sistemática?
La revisión narrativa tiene como objetivo describir una temática con cierta profundidad, o aportando cierta visión clínica. La diferencia respecto a una revisión sistemática es que no busca cuantificar un efecto haciendo una búsqueda sistemática de estudios, sino que busca discutir, explicar, contextualizar, referenciando cierto número de estudios relevantes para la explicación.
Una revisión sistemática buscaría responder a una pregunta de investigación muy concreta y cuantificarla, por ejemplo "¿cuánto dolor reduce un analgésico en migraña respecto a placebo, si sumamos todos los estudios realizados con dicho fármaco y promediamos el efecto conjunto de los estudios realizados?". Consistiría por tanto en entrar a motores de búsqueda (Pubmed...) y hacer una búsqueda sistemática con el objetivo principal de recopilar todos los estudios publicados de una intervención concreta para cuantificar el efecto del conjunto que arrojan los estudios. Dado que lo importante es medir el efecto del conjunto de estudios, y no queremos dejarnos nada fuera que pueda conducir a un error cuando sumemos el resultado conjunto, necesitamos una búsqueda explícita, cuidadosa, sistemática, detallada, exhaustiva y replicable con exactitud por cualquier persona que quiera revisar el resultado.
Contrariamente, una revisión narrativa no pretende encontrar todos los estudios sobre una intervención de manera sistemática con el objetivo de medir un efecto, sino contextualizar una cuestión. En este caso, puede que queramos preguntarnos ¿qué determinantes de la migraña conocemos, y que tipos de tratamiento hay? Esto no es una búsqueda sistemática de una intervención, sino que es una exploración más abierta, de distintos estudios, realizando una exploración de las distintas intervenciones, aportando cierta perspectiva, etc.
Una revisión sistemática nos muestra por tanto si un tratamiento es eficaz, y nos da alguna medida del efecto. Sin embargo, no da una orientación clínica a esos hallazgos, ni aporta contexto, ni nos habla de alternativas de tratamiento, ni se da una visión epistémica o clínica que el autor de la revisión considere relevante discutir.
Aquí es donde la revisión narrativa puede aportar valor, al contextualizar y profundizar en las explicaciones, dar orientación clínica, contrastar distintos hallazgos o distintas posibilidades terapéuticas, etc. La revisión narrativa no pretende encontrar todos los estudios realizados sobre un tratamiento específico con una búsqueda exhaustiva, ni pretende describir sobre todos los tratamientos. Simplemente explora una temática incluyendo aspectos importantes, y reflexionando sobre ellos.
Suele considerarse la revisión sistemática como más importante ("mayor nivel de evidencia"), o más objetiva por su sistemática cuantificadora. Sin embargo, esta visión tan común es reduccionista, particularmente para la aplicación clínica que requiere un contexto más complejo y cualitativamente diferente que se pierde en la mera cuantificación positivista. Ambos tipos de revisiones sirven a propósitos diferentes. La primera cuantifica, la segunda explica, contextualiza. Ambos tipos de revisiones son importantes para conseguir madurez epistémica y clínica de un tema. Es más, a menudo el efecto que se obtiene en una revisión sistemática o metaanálisis puede no estar adecuadamente interpretado o ser inferior a otras opciones no consideradas, siendo la revisión narrativa la que puede debatir por qué los resultados de la revisión sistemática (o su aplicación) son cuestionables, o necesitan un contexto para entenderse adecuadamente, más allá de ser asumido simplemente con el mantra "mayor nivel de evidencia". La realidad es más compleja.
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